MIAMI - Los aspirantes a la candidatura presidencial republicana criticaron rápidamente a Donald Trump el miércoles por no acudir a su tercer debate, e insinuaron que ya no es la misma persona que logró llegar a la Casa Blanca.
Luego de que Trump siguió sin acudir a estos debates, y en lugar de ello llevó a cabo su propio evento en un suburbio cercano, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, dijo: “Les debe a ustedes estar en este escenario y explicar por qué debería tener otra oportunidad”.
Nikki Haley, exembajadora de Estados Unidos ante la ONU —que le está quitando a DeSantis algo de interés de parte de los electores y los donantes—, dijo que Trump “solía estar en lo correcto” al respaldar a Ucrania, pero “ahora le flaquean las piernas”.
"Donald Trump es un tipo muy diferente al que era en 2016", dijo DeSantis, en alusión a la primera campaña presidencial del exmandatario, en su alocución inicial, durante la cual acusó al expresidente de ser responsable de los malos resultados para los republicanos en la jornada electoral del martes.
"Estoy harto de que los republicanos pierdan", agregó el gobernador de Florida, segundo en intención de voto entre los votantes de ese partido, quien además lamentó que el exmandatario no haya participado en ninguno de los tres debates celebrados hasta la fecha en este proceso de primarias.
"Te debe explicar por qué debería tener otra oportunidad", dijo DeSantis al moderador Lester Holt, de la cadena NBC News.
A su turno, Haley tampoco se guardó criticas al presidente, de quien dijo que fue "el presidente correcto en el momento correcto".
"No creo que sea el presidente adecuado ahora", agregó Haley, tercera en intención de voto, que además acusó a Trump de aumentar la deuda nacional.
A su turno, el exgobernador de Nueva Jersey Chris Christie señaló que Trump tendrá que pasar el próximo año en los tribunales para responder por los cuatro procesos criminales que afronta en vez de enfocar en los problemas del país, mientras que el empresario Vivek Ramaswamy y el senador Tim Scott evitaron ataques directos al expresidente.
Además de DeSantis y Haley, en el escenario también se encontraban el senador de Carolina del Sur, Tim Scott, el exgobernador de Nueva Jersey Chris Christie, y el empresario de biotecnología Vivek Ramaswamy.
Los cinco aspirantes presentes enfrentan una nueva urgencia de recortar los márgenes de ventaja que Trump les lleva en las encuestas, en un momento en que las asambleas partidarias de Iowa se encuentran a sólo dos meses de distancia.
En su primer debate desde que estalló la guerra entre Israel y Hamas, los precandidatos republicanos a la presidencia declararon todos su apoyo a Israel el miércoles, pero discreparon en cuanto a China y Ucrania mientras enfrentan una creciente presión por dar alcance en las preferencias a Donald Trump, quien nuevamente se ausentó del evento.
Los protagonistas fueron DeSantis y Haley, quien le ha presentado competencia al segundo puesto de DeSantis en algunos sondeos nacionales. Haley, la exgobernadora de Carolina del Sur y embajadora ante Naciones Unidas, declaró que pondría fin a las relaciones comerciales con China “hasta que dejen de asesinar a los estadounidenses con fentanilo — algo que Ron aún no dice que hará”.
En respuesta, el gobernador de Florida dijo que Haley “acogió” la inversión china en su estado, en referencia a acuerdos de desarrollo económico e inmobiliario. Haley posteriormente acusó a DeSantis de eliminar sitios web oficiales para ocultar que Florida se ha promovido como una puerta abierta para los negocios chinos.
Haley, DeSantis y los otros en el escenario dijeron que respaldan firmemente a Israel en su ofensiva en Gaza tras el ataque de Hamas del 7 de octubre, que dejó más de 1,400 muertos.
Los aspirantes no hablaron sobre la ayuda humanitaria a los civiles en Gaza, luego de que el número de palestinos muertos en la guerra ya superó los 10,500, incluidos más de 4,300 niños, según el Ministerio de Salud de Gaza, operado por Hamas.
Varios de ellos también dijeron que presionarán a las universidades para que apliquen medidas enérgicas con el fin de aplacar el antisemitismo.
El Adrianne Arsht Center del centro de Miami acogió este miércoles el tercer debate republicano con la gran ausencia del claro favorito en el proceso de primarias de este partido, Donald Trump, quien prefirió celebrar un acto paralelo en Hialeah, a pocas millas de la sede del evento.
El expresidente desarrolla su campaña en medio de un complicado escenario legal, con cuatro procesos abiertos, los que, sin embargo, no parece que le hayan hecho mella, en vista de que las encuestas lo ponen como claro favorito en las primarias republicanas, y con unos 40 puntos porcentuales de ventaja.