Este jueves se cumple un año del temblor de 5.7 de magnitud que sacudió a Utah y todavía se sienten los estragos, no solo en las estructuras, sino también en la salud mental de los residentes.
La tierra comenzó a moverse a las 7:08 a.m., según la estación de Sismología de la Universidad de Utah los movimientos iban del noroeste a sur oeste, con ondas sísmicas en forma vertical, conocidas como trepidatorias, con una magnitud de 5.7 con epicentro en Magna y una duración de 20 segundos.
El temblor se originó en una falla en la corteza poco profunda de la placa de América del norte, produciendo un deslizamiento ubicado en el cinturón sísmico de Intermountain, una zona prominente de sismicidad, aunque expertos señalan que son tantas las falles en Utah y además tan profundas que se conoce poco de cada una, por lo que es difícil determinar cuál fue la falla responsable.
Cerca de 55 mil viviendas se quedaron sin energía y se convirtió en el temblor más fuerte desde 1992 en Utah.
Casas y negocios fueron afectados, paredes se cayeron, y hasta la trompeta del Angel Moroni del templo de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Dias del punto más alto cayó al piso, por fortuna no se reportaron heridos.
Desde el 18 de marzo del 2020 hasta el 28 de febrero de este año se han reportado 2,590 réplicas siendo la más grande después del terremoto inicial de 5.7, dos de 4.6 ese mismo día.
¿Qué ha ocurrido con los residentes y comerciantes de Magna?
Local
Las manecillas del reloj no se han detenido en la zona histórica de Magna, aunque a simple vista todo se ve ordenado el impacto del terremoto de 5.7 cambio el curso de la historia en el estado de la colmena.
María es residente de Magna y cuenta que corrió a ver los niños y sacarlos de su cuarto.
Los comercios de la zona también sintieron el embate del sismo.
Cintia y su esposo son comerciantes en Magna desde el 2017, jamás pensaron que un terremoto cambiaría sus planes. Explican que perdieron material cuantioso en su taller de cristales, costándole una más de $ 11,000
Varias tiendas tuvieron que cerrar por completo ya que les tomó cerca de 6 meses en recibir la ayuda gubernamental.
Maria asegura que aprendió de la amarga experiencia. “Yo ya tengo mi bulto listo con papeles y ropa, para cuando tiemble de nuevo estar lista”, dijo.
¿Cómo debemos mantenernos seguros en caso de un nuevo terremoto?
La falla del Wasatch que atraviesa el estado de Utah ocasiona un terremoto de gran magnitud aproximadamente cada 350 a 400 años.
El último ocurrió hace 350 años, lo que incrementa las posibilidades de que en los próximos 50 años suceda lo que se ha denominado la gran sacudida en Utah, por lo que debemos estar preparados.
Los desastres naturales no se pueden prevenir, pero si se puede planificar de tal manera que reaccione de una forma más efectiva.
Uno de los planes que el Departamento para el Manejo de Emergencias en Utah ha creado es el de vecindarios seguros que trabaja con dos visiones:
- El primero es tomar tu equipo de emergencia e ir al punto de encuentro.
- El segundo es vecinos ayudando a vecinos.
El programa promueve la creación de un equipo de emergencia. Para esto es importante que tú y cada miembro de tu familia incluida tu mascota debe tener su propio equipo de emergencia de 96 horas.
Hay que recordar que el impacto de un fenómeno de este tipo puede llegar a ser muy fuerte al punto de afectar los servicios de agua, electricidad y comunicaciones por eso, el nivel de preparación personal va a determinar la calidad de vida después del terremoto.
Parte de las cosas que debe tener dentro de su vivienda es un extinguidor de fuego, un equipo de primeros auxilios y agua potable para cada persona de la casa para por lo menos tres días.
Cuando se trata de su vivienda consulte, ya sea con un ingeniero profesional, o con la guía para mejoramiento antisísmico, cuales son las principales modificaciones para asegurar la estructura; considere conseguir un seguro contra terremotos como parte de tu plan financiero y asegúrese de que el calentador de agua, muebles u objetos pesados no se puedan caer durante un terremoto.
La trompeta del Ángel Moroni cayó al suelo
El centro de Salt Lake y los alrededores del templo de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días vivieron momentos de pánico tras el sismo de 5.7, donde el impacto fue tal que ocasionó la caída de la trompeta de Ángel Moroni.
Los grandes daños se fueron viendo de inmediato. Vidrios rotos en comercios del centro de Salt Lake, estructuras desprendidas, además de la impactante caída de la trompeta del Ángel Moroni que reposaba en el templo de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
A un año, el reflejo se sigue viendo. El terremoto provocó que iniciaran una renovación en el templo para instalar una protección sísmica, además de otras mejoras.
Los residentes aseguran el terremoto fue una de las tantas cosas que vivió Utah el año pasado, catalogándolo como el año más difícil.
Ayudas para los afectados del terremoto
Un año después de que el terremoto de Magna sacudiera los condados de Salt Lake y Davis, las agencias federales han proporcionado más de $ 3.3 millones en préstamos y subvenciones para ayudar a los habitantes de Utah a recuperarse del terremoto de Magna y las réplicas.
Utah recibió una declaración de desastre importante el 9 de julio de 2020, lo que abrió la puerta a la asistencia federal.
Un total de 1200 hogares de Utah se registraron con FEMA para recibir asistencia con necesidades relacionadas con el desastre. FEMA ha aprobado más de $ 1 millón a través de su Programa para Individuos y Hogares (IHP), la mayoría de los cuales se destinan a asistencia de vivienda para ayudar a los propietarios afectados por el terremoto a hacer reparaciones o encontrar un lugar temporal para vivir.
Además, la Administración de Pequeñas Empresas de EE. UU. (SBA) ha aprobado 89 préstamos por desastre a bajo interés por más de $ 2.3 millones para ayudar a la recuperación de empresas de Utah, organizaciones privadas sin fines de lucro, propietarios e inquilinos.
Todavía hay tiempo para que las pequeñas empresas soliciten préstamos por desastre por daños económicos (EIDL, por sus siglas en inglés) de hasta $ 2 millones para ayudar a satisfacer las necesidades de capital de trabajo causadas por el desastre. La fecha límite para solicitar un EIDL es el 9 de abril de 2021.
Los solicitantes pueden presentar su solicitud en línea, recibir información adicional sobre asistencia por desastre y descargar solicitudes en https://disasterloanassistance.sba.gov/.
También pueden llamar al Centro de Servicio al Cliente de la SBA al (800) 659-2955 o enviar un correo electrónico a disastercustomerservice@sba.gov para obtener más información sobre la asistencia por desastre de la SBA.
Por otro lado, FEMA y el estado de Utah están lanzando una estrategia para abordar los riesgos que representan las estructuras de mampostería no reforzadas.
La mampostería no reforzada era un material de construcción común en todo Utah hasta que los códigos de construcción sísmica se volvieron más frecuentes en la década de 1970. Estos edificios de ladrillos quebradizos no incorporan el acero de refuerzo requerido por los códigos de construcción modernos.
Se estima que hay 140.000 estructuras de este tipo en todo el estado. Abarcan una amplia variedad de edificios, desde hogares individuales hasta negocios, escuelas y lugares de culto. Dichas estructuras pueden sucumbir más fácilmente al movimiento y sacudidas durante un terremoto, lo que representa una amenaza para los ocupantes del edificio, así como para las personas que se encuentran en el exterior en las proximidades de las estructuras.
El documento, Estrategia de reducción de riesgos de mampostería no reforzada de Wasatch Front, proporciona orientación a las comunidades de Utah sobre cómo identificar su propio riesgo y luego tomar medidas para abordarlo.
Para más información visite www.fema.gov.
Programa "Arreglar los ladrillos"
Salt Lake City ofrece una oportunidad única para que los propietarios de viviendas implementen modificaciones sísmicas en sus viviendas de mampostería no reforzada (URM).
Los edificios y casas de mampostería no reforzada (URM) crean el mayor riesgo para el Valle de Salt Lake en el esperado terremoto de Utah.
El programa “Fix the Bricks” de Salt Lake City facilita mejoras sísmicas para los URM de sus residentes en un esfuerzo por salvar vidas al reducir el número de muertos, heridos y atrapados después de un terremoto.
Los fondos que respaldan este programa provienen de la subvención federal de mitigación previa al desastre.
La ciudad tiene la intención de solicitar la subvención todos los años y cada año tratar de aumentar la cantidad de propiedades para incorporar al programa.
Puede registrarse para este programa en el siguiente enlace.