La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días anunció el retiro de sus misioneros mayores y jóvenes con afecciones médicas graves o crónicas que se encuentran en Europa.
Los misioneros, que provienen de 22 misiones en toda Europa, regresarán a casa a partir del jueves 12 de marzo de 2020. Según La Iglesia el retiro se debe para evitar el riesgo o complicaciones con el coronavirus.
Después de regresar a casa, se aislarán por 14 días. Estos misioneros no recibirán una nueva asignación temporal, pero serán considerados para su reasignación una vez que la situación con el COVID-19 disminuya.