GRANTSVILLE, Utah — Mientras los investigadores intentan descifrar por qué un adolescente disparó y mató a cuatro de sus familiares, sus seres queridos se congregaron para llorar a la familia en un funeral esta semana en un pequeño vecindario de Utah.
La policía dijo que el menor se rindió pacíficamente después de matar a una mujer de 52 años y a tres de sus hijos e hiriendo al padre de los niños el viernes pasado en Grantsville, una ciudad de 11,000 habitantes a unas 35 millas al oeste de Salt Lake City.
Pero desde entonces se ha negado a hablar con los detectives que intentan reconstruir un posible motivo.
Las autoridades se han negado a revelar la edad, el nombre o la relación del sospechoso con las víctimas hasta que se presenten cargos formales.
Un funeral para Consuelo Alejandra Haynie, 52; sus hijas Alexis, de 15 años, y Maylan, de 14; y su hijo Mathew, de 14 años, fue programado para el mediodía del viernes en un edificio de adoración regional para La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en Grantsville, dijo el martes una morgue en una publicación en línea.
Cientos de personas se reunieron el lunes por la noche para una vigilia a la luz de las velas por la familia, donde algunos expresaron compasión por el sospechoso.
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"En tantos niveles, esto es tan trágico para nuestra comunidad", dijo Diane Passey, amiga de la familia, según Deseret News. "No solo por la madre y las cuatro vidas perdidas, sino también por el pobre joven que estaba en un lugar tan oscuro".
La policía respondió a una llamada de disparos dentro de la casa de la familia el viernes por la noche y encontró los cuatro cuerpos, dijo la sargento de policía Rhonda Fields.
El atacante y el padre de la familia no estaban, dijo. Más tarde, las autoridades descubrieron que una persona que llegó a la casa después del tiroteo llevó al adolescente y al hombre a un hospital, agregó Fields. Los oficiales arrestaron al menor allí.
El padre de la familia fue dado de alta del hospital después de ser tratado por una herida de bala y estaba hablando con los investigadores.
Intentaban armar una línea de tiempo para ayudar a descubrir qué sucedió, dijo Fields. Las autoridades dijeron que no habían sido llamados a la casa en el pasado.
"La pregunta más importante que todos tienen es 'por qué', y aunque es posible que no podamos responder eso directamente, esperamos poder recopilar información para poder ayudar a las personas en el futuro a evitar algo como esto u ofrecer apoyo a quienes lo necesiten ", dijo Fields.
Los familiares de las víctimas pidieron privacidad durante la investigación.
El niño estaba detenido en un centro de detención juvenil bajo sospecha de cuatro cargos de asesinato agravado, un cargo de intento de asesinato agravado y múltiples cargos de armas de fuego.
Las autoridades dijeron que él es el único sospechoso. La persona que los llevó al hospital no participó en los disparos, dijo Fields.
Parece ser el tiroteo masivo más grande en Utah desde 2007, cuando un hombre armado con una escopeta mató a cinco personas y a él mismo en un centro comercial de Salt Lake City.
