ACAPULCO, México - El puerto mexicano de Acapulco recibió este miércoles su primer crucero internacional tras el impacto del huracán Otis, que dejó más de 50 muertos y a cerca del 80% de los hoteles dañados, por lo que los habitantes esperan una reactivación del turismo.
El barco de Norwegian Bliss arribó a las 7:00 a.m. procedente de Manzanillo, estado de Colima, a la terminal Cruceros de Acapulco con 5,424 personas, de las que 3,791 son pasajeros y 1,633 tripulantes.
Se espera que alrededor de las 5:00 p.m. hora local (23:00 GMT) el crucero zarpe de Acapulco hacia Puerto Quetzal, en Guatemala.
Prestadores de servicios turísticos expresaron a EFE que la llegada del barco representa una esperanza para recuperar el turismo en Acapulco, donde apenas 127 de los 600 hoteles están operando.
El taxista José Pérez Salazar, quien tiene 25 años trabajando con turistas que llegan en los diferentes cruceros, señaló que este sector es crucial para el gremio porque pagan hasta 35 dólares la hora.
“Somos 75 taxistas que integramos esta coalición, todos estamos aquí, a nuestras posibilidades, con nuestras limitaciones y nuestros daños en los vehículos, pero estamos aquí para brindarles el servicio de siempre, la calidez que nos caracteriza", comentó.
"Es muy importante para nosotros, es un respiro económico con la visita de estos turistas”, agregó.
El 25 de octubre pasado Otis rompió el récord de intensificación para un ciclón en México por crecer de tormenta tropical a huracán categoría 5 en menos de 12 horas, antes de tocar tierra en Acapulco, donde el 87% de la población percibe al menos algún ingreso del turismo, según el Gobierno municipal.
El guía turístico José Arroyo Jiménez señaló que cobran 20 dólares por persona para los recorridos, por lo que 15 compañeros acudieron al muelle para buscar clientes.
En el crucero, donde trabaja como cajera del casino, llegó también María Hernández, habitante del poblado de La Sabana que, ante la cancelación de dos arribos al puerto por las afectaciones del huracán Otis, no veía a su familia desde hacía meses.
"Pensé que no lo íbamos a lograr porque ya eran dos veces que cancelaban el crucero y cada vez que íbamos a llegar (decían) que no se puede y no se puede, pero mira, ya por fin llegamos y mira estoy con mi familia de nuevo, porque yo tenía mucha desesperación por verlos”, expresó al abrazar a su hermana y sobrinos.
En la terminal Cruceros de Acapulco los visitantes aún se topan con afectaciones en el muelle fiscal, que el Gobierno también ha ocupado para resguardar algunos enseres domésticos que entrega a los damnificados.
También hay agentes de la Guardia Nacional que lo usan como base para sus patrullajes de seguridad en Acapulco y la Costera Miguel Alemán.