ESTAMBUL — El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdoğan, ganó la reelección el domingo después de ver el mayor desafío a su mandato de 20 años.
El Consejo Supremo Electoral de Turquía declaró oficialmente a Erdogan como el ganador de la segunda vuelta presidencial del domingo.
En sus primeros comentarios desde el cierre de casillas, Erdogan se dirigió a sus simpatizantes desde un autobús de campaña ubicado fuera de su residencia en Estambul.
“Agradezco a cada miembro de nuestra nación por confiarme la responsabilidad de gobernar una vez más este país por los próximos cinco años”, declaró.
Se burló de la derrota de su rival, Kemal Kilicdaroglu, diciendo “bye, bye, bye, Kemal”, ante los abucheos de sus partidarios.
“El único ganador este día es Turquía”, declaró Erdogan.
Los resultados preliminares no oficiales de las agencias de noticias turcas habían mostrado que el actual presidente Recep Tayyip Erdogan ganó con el 98% de las urnas contadas en una segunda vuelta presidencial.
La agencia de noticias estatal Anadolu mostró a Erdogan con un 52.1% y a su rival, Kemal Kilicdaroglu, con un 47.9%.
Mientras tanto, la agencia de noticias ANKA, cercana a la oposición, mostró los resultados en 51.9% para Erdogan y Kilicdaroglu en 48.1%.
En Estambul, los partidarios de Erdogan comenzaron a celebrar incluso antes de que llegaran los resultados finales, ondeando banderas turcas o del partido gobernante y haciendo sonar las bocinas de los autos.
El resultado podría tener implicaciones mucho más allá de Ankara. Turquía se encuentra en la encrucijada de Europa y Asia, y desempeña un papel clave en la OTAN.
El gobierno de Erdogan vetó la oferta de Suecia para unirse a la OTAN y compró los sistemas rusos de defensa antimisiles, lo que llevó a Estados Unidos a expulsar a Turquía de un proyecto de aviones de combate liderado por Estados Unidos. Pero también ayudó a negociar un acuerdo crucial que permitió los envíos de granos de Ucrania y evitó una crisis alimentaria mundial.