El presidente de Argentina, Javier Milei, aceptó una invitación del papa Francisco para visitar el Vaticano en los primeros días de febrero, en el que será el primer cara a cara entre ambos tras las polémicas declaraciones del mandatario ultraderechista contra el religioso durante la campaña electoral.
La cancillería argentina informó el viernes en un comunicado que Milei “tiene intención de participar de la misa Solemne de Canonización de la Beata María Antonia de San José, Mama Antula, que tendrá lugar en la Basílica de San Pedro el próximo 11 de febrero”.
La jefa de la diplomacia argentina, Diana Mondino, trasladó la respuesta afirmativa del presidente a la invitación que le cursó Francisco al Nuncio Apostólico, monseñor Miroslaw Adamczyk, durante un encuentro que mantuvieron el mismo viernes.
La confirmación del viaje de Milei al Vaticano apunta a dar por cerrada la controversia que generaron las descalificaciones que, en la etapa previa a las elecciones presidenciales, dirigió el entonces candidato ultraderechista al líder religioso.
Milei había tildado al líder religioso de “representante del maligno en la Tierra” cuando, unos dos años atrás fue entrevistado en un programa televisivo, y luego cuestionó su supuesta afinidad por el comunismo y “dictadores sangrientos” de Latinoamérica en declaraciones realizadas durante la carrera por la presidencia.
En uno de los debates en la televisión antes de los comicios, Milei pidió disculpas por los improperios que profirió contra el pontífice.
Francisco, que nunca replicó públicamente esos agravios, se comunicó telefónicamente con el presidente electo para felicitarle por triunfo en el balotaje de noviembre.
La beata María Antonia de Paz y Figueroa fue una religiosa que ejerció su misión espiritual en el siglo XVII, pero a la cual se le atribuyen dos milagros luego de su muerte. Se convertirá en la primera santa nacida en Argentina.